Estudiaste y te titulaste. Pero ahora te persigue un monstruo con corbata: el Crédito con Aval del Estado (hoy con Garantía Estatal). Y si dejaste de pagar, más vale que leas esto antes de que el banco toque tu puerta… pensando que aún no lo ha hecho.
Tres cuotas sin pagar; solo tres y el banco ya se pone nervioso. Empieza la cobranza extrajudicial, la primera etapa de la operación. Te llaman, te escriben y ruegan (más o menos). Te dan la oportunidad de ponerte al día; si lo haces, vuelves a la normalidad.
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¿Todavía no te decides en pagar el crédito?
Esta podría ser la peor idea. Ahora viene la demanda judicial, una suerte de artillería pesada.
Aquí el banco no anda con rodeos, pues exige todo el crédito completo. Así, sin anestesia. La deuda entera, con intereses, comisiones y lo que se te ocurra. Y lo peor: pueden llegar a embargar tus bienes.
Tu computador, tu auto, hasta tu sueldo pueden estar en la mira.
¿Y por qué tanta rigidez?
Porque el CAE es un crédito bancario, no estatal. El aval del Estado solo se activa bajo condiciones específicas. Y si no cumples, quedas solo frente al banco. Pero no todo está perdido. Existen caminos para salir de esta. Uno de ellos es asesorarte con expertos que sepan del tema. ¡Estudiar no debería convertirse en una condena eterna!
Nuestro equipo de especialistas puede ayudarte a revisar tu caso y encontrar la mejor estrategia para que recuperes tu tranquilidad.