¡Emprender por segunda vez es posible! La misma Ley de Quiebra señala que la persona/empresa, luego de acogerse a dicha operación, se entiende «rehabilitada». De hecho, uno de los objetivos de la regulación es dar a las personas la posibilidad de volver a ser sujetos de crédito.
En Deudas.cl te entregamos una explicación más a fondo acerca de esta interesante interrogante.
¡Buenas noticias! Puedes emprender luego de acogerte a la Ley de Quiebra en Chile. Esto, gracias a las disposiciones de la Ley 20.720 de Insolvencia y Reemprendimiento. Esta ley permite a personas naturales y jurídicas declararse en quiebra y luego rehabilitarse financieramente para volver a emprender.
La Ley de Quiebra establece dos procesos principales
- La renegociación está diseñada para quienes pueden pagar sus deudas en condiciones más favorables. Permite reestructurar las obligaciones financieras.
- La liquidación, en cambio, implica vender los activos del deudor para pagar a los acreedores. Es una opción viable si no hay capacidad de pago. Una vez finalizados estos procesos y cumplidos ciertos requisitos, las deudas se consideran extinguidas. Esto puede limpiar el registro de morosidades del individuo, permitiéndole comenzar de nuevo.
Es importante destacar que bajo la Ley 20.720, una persona puede declararse en quiebra múltiples veces. Sin embargo, debe existir un intervalo de al menos cinco años entre cada declaración. Esto proporciona un marco para la rehabilitación financiera y la posibilidad de emprender nuevos proyectos o negocios una vez resueltas las deudas anteriores.
Para este proceso, es crucial contar con asesoría legal especializada. Esta ley exige la representación por parte de un abogado para iniciar cualquier procedimiento de insolvencia. En Deudas.cl contamos con un equipo de expertos dispuestos a ayudarte. ¡Contáctanos ahora!
En resumen, acogerse a la Ley de Quiebra conlleva afrontar un proceso legal riguroso. Incluso, puede impactar temporalmente la capacidad de obtener crédito. Sin prejuicio de lo anterior, también ofrece un camino estructurado hacia la recuperación financiera y la posibilidad de emprender nuevamente una vez que las finanzas personales o empresariales se han estabilizado.