Enfrentar un embargo puede parecer una pesadilla. Pero no todo está perdido de forma inmediata. En Chile, la ley ofrece alternativas para evitar que tus bienes sean tomados por orden judicial. Aunque el proceso es complejo, es posible frenarlo si se actúa con rapidez y estrategia.
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Cinco formas de dejar sin efecto una orden de embargo
1. Una primera opción es la negociación directa con el acreedor. Si aún no se ha ejecutado la orden de embargo, puede proponerse un plan de pago, un acuerdo extrajudicial o incluso la entrega de una garantía. Esto puede evitar el juicio y todos los costos asociados.
2. Si ya existe una orden, es posible presentar una oposición judicial. Esto debe hacerse con la asesoría de un abogado, dentro de los plazos legales. Se puede argumentar, por ejemplo, que la deuda está prescrita o que el procedimiento no fue notificado correctamente.
3. Además, la ley protege ciertos bienes. Algunos artículos del hogar, herramientas de trabajo y objetos necesarios para la vida diaria no pueden ser embargados. Es clave identificarlos y declararlos como inembargables antes de que el receptor actúe.
4. También se puede pedir al tribunal que revise la legalidad del embargo. Si se demuestra que se actuó fuera del marco legal, el juez puede suspenderlo.
5. Otro camino es la declaración de insolvencia. Este procedimiento protege al deudor mientras se reestructura su situación económica.
¡Estamos contigo!
En todos estos casos, contar con asesoría legal es esencial. Equipos como los de Deudas.cl acompañan a los deudores en cada paso del proceso, asegurando que sus derechos sean respetados. Detener un embargo requiere información, acción rápida y apoyo legal. Mientras más informado esté el deudor, más herramientas tendrá para defender su patrimonio.
Nuestro equipo de especialistas puede ayudarte a revisar tu caso y encontrar la mejor estrategia para que recuperes tu tranquilidad.