El teléfono suena una y otra vez. Es el mismo número de siempre. Lo bloqueas, pero insisten desde otra línea. Te llaman en la mañana, en la tarde y hasta de noche. ¡Basta! Esto no es normal. Se trata de acoso telefónico, y sí, en Chile puedes denunciarlo a través del famoso No Molestar.
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El acoso telefónico puede venir de empresas de cobranza, ventas agresivas o incluso de personas particulares. No es solo una molestia, es un problema real que afecta la tranquilidad de miles de personas. La buena noticia es que existen herramientas legales para frenarlo.
¿Cómo denunciar el acoso telefónico?
Primero, identifica quién te llama:
- Si es una empresa, pide que dejen de contactarte. Tienen la obligación de hacerlo.
- Si continúan, puedes denunciarlos en el Servicio Nacional del Consumidor (SERNAC). Es ilegal que sigan llamando si ya solicitaste el cese de contacto.
- ¿Las llamadas son amenazas, hostigamiento o simplemente no paran? Acude a Carabineros o la Policía de Investigaciones (PDI).
- También puedes presentar una denuncia en la Fiscalía. La Ley N° 21.459 sobre delitos informáticos contempla sanciones para este tipo de situaciones cuando se convierten en hostigamiento constante.
- Otra opción es solicitar a tu compañía telefónica que bloquee los números molestos. Algunas ofrecen esta herramienta sin costo.
- También hay aplicaciones que detectan y filtran llamadas sospechosas.
No Molestar: ¿Qué dice la ley?
En Chile, la Ley del Consumidor protege a las personas frente a prácticas abusivas de empresas. Si un cobrador te acosa, exigiéndote pagos con llamadas insistentes o mensajes amenazantes, puedes reclamar ante SERNAC y exigir una compensación.
Para los casos más graves, el Código Penal castiga el hostigamiento telefónico con multas e incluso penas de cárcel si hay amenazas. Si se trata de violencia intrafamiliar, el llamado no solicitado puede ser prueba en una denuncia por acoso o abuso psicológico.
Ahora, ¿qué hacer si sigues recibiendo llamadas?
- Guarda pruebas.
- Registra los números, los horarios y la frecuencia de las llamadas.
- Haz capturas de pantalla si son mensajes.
- Si necesitas respaldo legal, acude a un abogado especializado.
El acoso telefónico no es solo una molestia. Es un problema que tiene solución. No tienes que soportarlo. Tienes derecho a exigir tranquilidad.